Thursday, August 30, 2007

Coatlicue


... el apego a los objetos («ragâ») transforma a los objetos en la perfecta satisfacción o plenitud del Sí-mismo en aspiración determinada hacia determinados objetos: Javier Rou

Me has querido bien,
paciente, sana, vigorosamente.
Que yo sacara dulzura de la peña
y me lavara en el río
donde te bañas y alimentas
ha sido tu esperanza.

Pensaste que yo doy vida,
pero más vida hay en tí,
depósito silvícola, centinela de kakón.

Te difaman, hígados de indio,
y se equivoca: tú, más candidez
sacrificaste ante el Hades
por los hijos perdidos en la sombras.
Negro luto quemas en rituales
siendo adorable sin saberlo.

Más finos y tersos tus pétalos,
flor oscura, que las de muchas mañanas
y en tu vivir, Coatlicue,
menos arrugas y dolor dejaste.

Han sido tan limpias tus llamas,
fuego purificador, porque litas.
Lo sé porque me has querido
y el altar no miente
en la paciencia que atestigua.

¡Soy el residuo más dulce
que creaste en el carbono!

5-14-1980 / De Tantralia

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Kama


... a substance-principle of which man's constitution is composed. Kama is the driving or impelling force in the human constitution; per se it is colorless, neither good nor bad, and it is the seat of living electric impulses, desires, aspirations, considered in their energic aspects: G. de Purucker


El alma hay que extraerla sin carencia.
Por eso voy por Coatlicue.
Quizás a la casa de Celeo.
¡Que salga ese kakón y la despierte!

Mi ansiedad de mexitin
da sus frutos en las noches,
pero me falta a Baubo por nodriza:
alguien que me perturbe
en la ausencia de istacoate
cuando mi estera está vacía.

Quiero que a flor de carne amanezca
la serpiente rolliza de alegría.
Que la niña sea una estrella:
y la bragueta sea la cuna
y ella vivaracha, lasciva, salerosa.

15-7-1980 / De Tantralia
El Gringo Cubero / La capitoleña / La paliza / La sangre que se escurre / Bernardino Sánchez

Ixchel, diosa de la Luna


Antes que conociera la Puerta del Sol
y a Siva, con su media-luna, ví el astro de la noche.
Venía como lechuza, llena de conceptos,
fría como el agua, invernal como el norte,
pasiva y receptiva, dependiente, vampírica.

Animal biológico es la mujer que pasa.
Devenir cíclico, mujer que crece, decrece, se va,
desaparece; yo fui su primer muerto.
En la casa del resplandor, Kinich Ahau,
ella fue el ojo malo, ojo malo de luna.

Al irse, ¿quién cree que lloraba sus partidas?
Yo, por Ixchel, la fea, cuyas serpientes
le sirven por diadema. Me hería la prisa
de su noche. La quise tercamente
como quieren los conejos y borrachos.

Un día que la retuve
me mordió un pedazo de alma,
de Rayi-Prakriti, de materia.

Me enamoré de ella. Y fue tan simple
lo que hice. Más súbitamente que violento,
me detuve en su sexo, despojé su hazaleja.

Comí del musgo púbico. Chupé en la charca
del jugo vaginario y canté 108 veces
el sonido-raiz de la vulva vibrátil: bhagabija.

Frag. 7 / Rapto de Europa

Nature unrelenting’s dominion’s and its pattern,
The Ardhanarishvara, the union of spirit and material,
the Being and his Shakti (force) are inevitable:

Vajrayana, maestro budista


En vísperas de la irrupción de los nuevos etruscos
(de la tecnología, el ocio, el lujo y frívolas bisuterías
de la conducta), en escenario decorado
con la Maya del civismo, te raptaron, Mujer.

Los que no merecen la reina, los ágamos,
seductores gimnofóbicos, pistoleros
con las caras de gualda, abejorros
de jolgorio violento, te llevaron consigo.

En la época del lenguaje dividido
del amor, te raptaron, Europa,
y pensaron de pronto en violarte
y robarte la (k)cama y tus nichos sagrados
en los montes y el río que tienes como fondo,
lo tentador que atrae por su humedad,
tu ritmo cósmico de luna, tu olor
de yoguini, tu cadera que amenaza
cuando rota, en chacra-puja.

A tu hogar llamaron la prisión materna.
Tiranía, Materia voluntariosa, bruja perversa.
De tus ritos dijeron que son peligro de opresiones.
Temieron en tus bosques, los cipreses escondidos
(esperaron tener armas de hierro,
caballo y cuchillerías). Sólo después
llegaron los fuñinges / cobardones con alardes.

De Tantralia

Europa, la reina


Como hordas de arrebato se presentaron
ante tí, Europa, te quitarían el poder,
la colmena, la unidad bienhechora,
tu rol matriarcal, tu frenesí emocional,
Grandiosa Reina… y tú, mera Devadasi,
eras el más perfecto y limpio de los lotos.

Alumna que danzas con sabiduría,
hembra que del orgasmo
hicíste un arte de melao, el mahasukha,
¡oh! más azuquita, mami!

En ese bosque, womb-like-place,
tu cueva abierta entre el mons púbis,
¿acaso no se cantaron idóneamente
los mantras más potentes y feraces,
tu Fertilidad, tu mística leche,
nuestro alimento, el pasto abierto?

En ese altar de la Kula,
¿acaso no nos díste el lenguaje
y el reloj del corazón los primeros latido
y te aprendimos tanto, porque no fuimos
otra cosa que zánganos, lo más estéril
e inmaduro del ser-entitativo,
lo meramente orgánico,
sin la noción del Atman?

De Tantralia

Monday, August 20, 2007

Magna Dea

Lilith ha sido vinculada también con unos seres … parecidos (esta vez diurnos) a las ninfas de los campos, de tersos cuerpos etéreos, relucientes de sol; criaturas indomables, inocentes, ardientes y salvajes, que fascinan y enloquecen a los campesinos, enamorándolos sin remisión: Paloma de San Miguel, sicóloga


De cierto que te imaginé, primera dama de la Historia
y eras mucho más que lo que había supuesto.
Eras la diosa magna, la altivez de lo proscrito,
Hija de los Abismos, eje del cosmos,
árbol de mi vida y mi muerte.

Contigo se asocia, no fuente alguna de pecado
(te desagravio: el pecado no existe). Eras madre
de mi previa humanidad, sabiduría profunda y yo,
creyéndote por crédulo, cosa menos, imaginándote
en carencias de plausibilidad y disparatada metaforería.

Lilith, en el nombre de las mujeres oprimidas
por su aún vigente capitalismo despojador y siniestro,
te bendigo; en el nombre de las víctimas
de las violencias ejercidas por el orden social patriocéntrico,
te exonero de los crímenes que se te adjudican;
en el nombre de los niños, doy tu nombre de Lilith
no como La Nocturna, sino como Reposo
y no te hace sombra una Lechuza de leyendas.

Eres veedora, la que más ve entre densas tinieblas
y desde las altas cumbres se requiere de vista;
Veedora, porque aún ves lo oculto del proceso
que se forja en la semilla, o en la matriz
de la Mar, o la hondura del pantano.

No hay perversidad en tí, heroína femínea.
No hay un esplendor sacrílego en tu cabellera.
No enredas corazones de enamorados
ni órganos sangrantes ni hay desdén
en tus hechizos; nada acumulas en cuevas,
nada hurtas, nada te apropias, nada celas
que no sea tu libertad, tu esplendor humano.

¿Quién ha sido más generosa con su sexualidad?
¿Quién más pródiga con el alimento? Tu ardor genésico,
tu rol de Madre Tierra, ¿quién es la dichosa hada
que habita las Montañas, el Lago y que danza
en las orillas de los arroyuelos?

4-19-1990 / De El hombre extendido

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No teman a La Bestia


a Lilith, esposa de Adán y primera mujer
antes del nacimiento de Eva


Contigo haré las paces porque yo me siento
igual que tú, si es cierto lo que dicen tus acusadores.
Que abríste la puerta de lo prohibido.
Que rechazaste el orden del Establecimiento
y aquello que pretendió ser la mala ley
contra tu rango / privilegio de Primera Madre.

Amaste la Luna llena, lo sé y toda autonomía.
¿Y cómo te llaman hoy? Luna Negra.
Con la autopertenencia te reclamas desde el ovario,
a las mamas desnudas y tu cabello ondulado,
abundante, es rojo y lo rizas y con él inventas
tu perfil y media luna y te ocultas con un manto
y, ¿quién ha visto tus nalgas tan hermosas
que no se desdiga en delirios, al soñarse
otra vez en el gozo de tu opulenta figura?

Haré las paces con el misterio que te alude,
bello animal, ambivalente corazón del inframundo.
Te veo en tránsito a una civilización que te olvida;
pero son ellos los seres aberrantes, malignos ellos
que cometen desacato y te maldicen,
comen de tu pan y se van, opositivos,
desagradecidos, tentados por los homicidios,
ávidos del deseo, porque nada más hermoso
ha sido visto, desde que nacíste,
perfecta entre las bestias, más perfecta
que el simio y el primate que es el hombre.

«Mala bestia», te llaman, «Doble-Opuesto,
diablesa, Luna Negra, Serpiente, Apátrida,
Infanticida, Transgresora».


Aquí estoy organizando esta memoria.
Te anticipo con amor: Lilith, me agradas.
Y nada humano es más real que tú.
En consecuencia, te llamaré como Adán
al bendecirte, mi descanso. Y aseguro ya
que fuíste, has sido y serás La más amada,
Caminante nocturna, Placer Militante
de la hembra más grata y adorable.


4-13-1990 / De El hombre extendido / Zoomblog

La Bestia / Hayo Bischat


We have to have a concept of peace that includes conflict… in which conflict is loving conflict. As Karl Jaspers said: Every real dialogue is a loving combat: Sam Keen


Un día comencé a imaginarla. La invitaría
a mi lado. La vería en las penumbras.
Los que me hablaron sobre Ella jamás se aproximaron
a su sombra ni a distancia… El odio no les permitió la simpatía.
No me dijeron que es tan bella. Me engañaron.
Su aparición es espontánea.
y, su entidad, la más inevitable…

Un día la llamé, Criatura Libre,
bestia del corazón onírico,
y la exhorté: «Habla conmigo».

Me dijeron que no invoque demonios y medité,
«¿cómo desagradarme yo con lo que eres,
si los demonios no existen?»


Amé tu idea con las polivalencias de tu posible ente.
Te mencionó brevemente el Libro Isaías; me solazaron
las referencias que de dí me dieron. Sobre todo, que te dijeran
la indómita, impetuosa, criatura rotundamente bella.

Te integré a mi corazón como el más antiguo
de mis símbolos. Te dije: ¡Madre mía! cuando voces
armadas de cuchillos, o pedernal hiriente, te llamaron
fatídica, rebelde, en súmero himno descrita por lujuria.

Un día te contuve en mi lenguaje. Te integré
a mi diálogo de vida; dejaste de ser una abstracción
del sinsentido. Te hallé contigua a este amor de infinito
y esta cercanía que es mi aquí, mi cuerpo mismo.

Y te imaginé, primera dama de la Historia.
Te ví en lecho de ramas, árbol abierto.
En el vientre del tronco yacías.
Esa fue tu cama flotante en el cauce del Eufrates.

¿Cómo llamarte Bestia, Innana, si vives en el jardín sagrado
y te gusta el rumor dulce de las aguas? ¿si eres
como un bebé que navega cuando vas rumbo a Uruk
para dar alegría? Un día vendrían a decirte
cuán bella crecíste como Lil, la noche, y cuántos guiños
de luz dejaste de tus ojos en el rastro de lo oscuro…

4-3-1990 / De El hombre extendido / Blogspot

De «El hombre extendido»


Tiene en sí, dijo el Ser, un secreto,
¿y cuál es? ...un torbellino que tira
hacia las cumbres lo mismo que al abismo.

El ser se durmió por un instante y la voz,
voz de los sueños privados en los hombres,
voz de ramera en comunión social de los humanos, calló.

Fue el reposo creador, larva del caos.
El secreto fue sordo, asesino,
mudez que clava a los ojos
con puñales, voz fiera,
secreta profecía.

Por su garganta de poesía,
se atropelló su canto: el ser y el pensamiento
son idénticos cómplices.
Se aman y se odian en silencio.

9-2-1980 / Carlos López Dzur / Brasil

Creación de la mujer

Yo, el creador,
descubridor del maiz,
fabricaré a la mujer.
La pondré en las milpas
como una mialma, alma mía.

¡Sí, ella será la flor más blanca
del nabaco, mi alegría!
No verá su rostro la ceniza
¡puño del sol, jamás!

Será luna y arrebol
la mujer de mis manos.
De rato a rato, verdaderamente,
en sus muslos, el día de Inti
gozará sus mollejas
y será dulce, blanda, vibrante,
si es que el coito fue
alguna vez amargo y torpe.

¡Voy a crearla y no para que muera
como alimaña atrapada en el mocuño!
¡Quiero que nadie la ofenda!

Y quien se atreva a hacerlo
por cualquier objetivo de sustancia:
¡que rompa y pague porque será más
luminosa en la noche, mi creación!

13-5-1979 / De El hombre extendido