DE LOS VICIOS DE LA PATRIA

DE LOS VICIOS DE LA PATRIA

«... me dijo en días del rey Josías: 
¿Has visto lo que hizo la infiel Israel? 
Ella andaba sobre todo monte alto y bajo todo árbol 
frondoso, y allí fornicaba»: Jeremías 3:6

En el horizonte está la patria 
y es la novia del varón y el guerrero
y el patriota que la bautizara, aludiéndola: 
«Es La Mujer Virtuosa,
joya de mi cetro, galardón por mis luchas
y perseverancias, razón para que,
en sacrificio, forje y defienda sus generaciones». 
La patria está allí con él en apariencia.
Ella en mojigatería y con pie suelto... 
El, en lucha todavía.

Allí, en el campo de las necesidades,
en anchura y de nalgas ante el horizonte 
donde habitan la conciencia y sus clamores,
viendo a su madre, ella dice: 
«¿Acaso no te prostituiste en Egipto? 
En tu juventud, allí fueron palpados tus pechos 
y allí fueron acariciados tus senos virginales. 
Pues, iré tras mis amantes, como antes
tú lo hicíste... Ellos me dieron pan y agua, 
me conpraron vestidos, aceites y perfumes.
Hoy en esta miseria ni agua tengo de beber».

Mira, ¡ay patria mía! el primer golpe
que me han dado, las primeras cadenas,
la amargura con que mi luto surje.
De tus adentros vino la humillación 
y el fango que me echaron en los ojos
cuando te gritan: ¡Ramera desvergonzada!
y de novia del guerrero, honra 
que adorna su casa, pasas a ser
idólatra del dólar, impureza 
contra tus propios símbolos y autóctonas lealtades.
Te vendes por un vaso de agua.
Cambias tu identidad por un orgasmo
con los invasores; das vivas a los agreden
y humillan a quienes te amaron.
Ahora despeñarías tus hijos contra los arrecifes
para ocultar tus depravaciones.
Ahora hasta vecinos que bendije me llaman
terrorista, lo repiten como papagallos
y son maníacos hijos de la cobardía
y mercenarios y cómplices
de espaldas a sus propios elucidarios.

09-15-2014 / CARLOS LOPEZ DZUR