BIOGRAPHY / C. LOPEZ DZUR / PRENSA BOLIVARIANA / Contenidos bolivarianos en Cinco Libros de Cuentos de Carlos López Dzur / MEMORIAS DE LA CONTRACULTURA // EL PUEBLO EN SOMBRAS / Crítico del imperialismo: Comediante alemán / EL LIBRO DE LA GUERRA LAS HIENAS: BESTIARIO COLONIAL / Memorias de la contracultura / Cuentos para esoteristas / ESTETICAS MOSTRENCAS Y VITALES / EL HOMBRE EXTENDIDO / LOPE DE AGUIRRE Y LOS PARAISOS; / ORGANUM: TEORIA DE LA SUSTENTABILIDAD / LIBROS DE CARLOS LOPEZ DZUR / LAS JUDERIAS / TETH: MI SERPIENTE / Licenciado Ektor Henrique Martínez: Sobre la poesía de López Dzur / MEMORIAS DE LA CONTRACULTURA / LAS HIENAS: BESTIARIO COLONIAL / EPICA DE SAN SEBASTIAN DEL PEPINO / BARNES AND NOBLE: LIBROS DE CARLOS LOPEZ DZUR / El humanismo erótico de Fanny Jaretón / Sacromental: Visión cabalística del poemario de Fanny G. Jaretón / Entrevista a Fanny Jaretón / NOCHEDAD / FANNY JARETON
Medita que la energía sigue ahí, sí, medita
que apenas supiste la Sustancia
y hoy sobre el camastro en tu agonía
la despides, ya no la oyes. No percibes
cómo arde y duele o deja de doler
lo que, a tu alcance, no está
en campos receptivos.
Te vas yendo ajeno a estímulos e imagen
del ego que tendrías, pero... todo
se va yendo al infierno de unas llamas
oblicuas, cuasi ocultas y danzantes,
como cerrados ojillos. Te vas, ser chikhai,
tibetano del proceso de captura
de la entera cognitividad.
Lo que llamaste vida, o consciencia,
degrada en capturas deficientes,
¡ay! pobre del bardo chikhai / miserable
al que le apagan la luz del pabilo.
Vas hacia alguna parcela quántica
regida por Saturno a quemar distraciones
de fuegos fatuos, quemar en su saturnalia
el mal humor, el padecer profano, cárceles,
pobreza, desgracia, vergüenza
de su previa existencia puta
y carencias remanentes al avanzar la muerte.
Quemar principios cuaresmales de tiempo
y aprendizaje cultural, social, mundano...
2.
Medita la captura pura y la designada
consciencia contingente y el proceso pre-atencional
inconsciente, que acumuló su basura informativa
y la tomó del ambiente. Son cenizas de saturnalia
que, en rigor, no valen lo que el aprendizaje.
Hay que volver al proceso
y el filtraje eficaz, al más puro,
al que hace que el hombre entienda,
prediga, medite y despierte
sus habilidades cognitivas.
Lo que traes es basura contingente.
Nada que sirva a propósito alguno.
Fantasías malenfocadas por privación de sueño
y vida estresada entre miseria y miedo.
Distracciones visuales por exceso de lealtad
a cavernas, a matrices de controles
y dominios aberrantes y falsarios.
Tibetano del gris, mustio de color naranja,
perezoso, lento: medita desde hoy
cómo el modelo de videa se cambia
y se abandona cada estímulo disímil
en cerebro y soluto sobre la faz de la Tierra.
¿Qué se puede hacer con el bardo que transita
hacia la muerte y llega sin imágenes precisas
que magnificar en la fovea,
con sombras de luz y oscuridad
que no pasaron a los núcleos geniculados,
laterales, del tálamo,
que siquiera procesaron presencialidades
de la retina hacia el córtex cerebral
donde el alma de las cosas obtiene
una cariz de ente
y comienza su Informe
de multisensoriales percepciones:
«Tengo imagen y escena.
No soy un fantasma vago.
Digno soy de recibir nuevos códigos
de un reacomodo intelectivo».
3.
Habrá que dar a este zombi del Estado Intermediario
sobre la vida y la muerte, ayuda adicional,
suplementaria, rezos de mantras,
liturgias, nuevas alas a este transeúnte
con karmas de cegato, resurtirlo
con Cesta hermosa sobre la cordillera de Gampo,
con un proceso de percepciones emotivas
y ponerle expresiones en el rostro.
Hay que enseñarlo a oír, enviarle ondas
a la corteza temporal, zona cerebral
de activaciones, la principal y más vital
de de todas. En la zona espiritual
de estímulos acústicos no queremos un tonto.
Que sea enviado a la derecha de una música
de almas, donde se orquestan las variaciones
melódicas de un canto vetromedial,
prefronticio del Hemisferio Derecho
y su corteza, que allí sea su frecuencia
elevada, sanada, y, en el hemisferio lateral
de la izquierda, que perciba el discurso del Oye,
por favor, oye la Dhyana...
4.
Necesito un tibetano con quien pasear
por infinitos paraísos, uno que antes que se vaya
en regreso a mundos de saturnalias terrenales
tenga integrados los sentidos: que vea, oiga,
huela, toque y sabore todo a un tiempo,
pre-atencionalmente apto.
Quiero entera la plasticidad de sus procesos,
aún de sus eventos potenciales
de reacción a los cambios y desafíos
de estímulo, uno maleable, diverso,
con memoria para todo lo que es bueno
en la luz de lo real y la 'liminalidad'del proceso de renacimiento.
Un Sidpa Bardo, bardo reencarnativo
que supere energías alucinatorias
y adopte formas del Buda que lo compadece
y lo traerá de la mano, con mejor recuerdo
de su naturaleza fundamental escondida,
más apto para el amor, la consciencia
y el provisional relevo de estar en el mundo,
e irse de él con su estado intermedio.
02-06-2006 / Del libro YO SOY LA MUERTE
Dhyana / Oye y ve, chikhai bardo
sobre el Estado Intermedio
«One can consider any momentary state of consciousness
a bardo, since it lies between our past and future existences;
it provides us with the opportunity to experience... These
individual texts cover a wide range of subjects, including
the dzogchen view..., meditation instructions, visualizations
of deities, liturgies and prayers, lists of mantras, descriptions
of the signs of death, and indications of future rebirth, as well as
those that are actually concerned with the after-death state»: W. Y. Evans-Wentz, Tibetan Book of the Dead: o,
The After-Death Experiences on the Bardo Plane (1927)
Medita que la energía sigue ahí, sí, medita
que apenas supiste la Sustancia
y hoy sobre el camastro en tu agonía
la despides, ya no la oyes. No percibes
cómo arde y duele o deja de doler
lo que, a tu alcance, no está
en campos receptivos.
Te vas yendo ajeno a estímulos e imagen
del ego que tendrías, pero... todo
se va yendo al infierno de unas llamas
oblicuas, cuasi ocultas y danzantes,
como cerrados ojillos. Te vas, ser chikhai,
tibetano del proceso de captura
de la entera cognitividad.
Lo que llamaste vida, o consciencia,
degrada en capturas deficientes,
¡ay! pobre del bardo chikhai / miserable
al que le apagan la luz del pabilo.
Vas hacia alguna parcela quántica
regida por Saturno a quemar distraciones
de fuegos fatuos, quemar en su saturnalia
el mal humor, el padecer profano, cárceles,
pobreza, desgracia, vergüenza
de su previa existencia puta
y carencias remanentes al avanzar la muerte.
Quemar principios cuaresmales de tiempo
y aprendizaje cultural, social, mundano...
2.
Medita la captura pura y la designada
consciencia contingente y el proceso pre-atencional
inconsciente, que acumuló su basura informativa
y la tomó del ambiente. Son cenizas de saturnalia
que, en rigor, no valen lo que el aprendizaje.
Hay que volver al proceso
y el filtraje eficaz, al más puro,
al que hace que el hombre entienda,
prediga, medite y despierte
sus habilidades cognitivas.
Lo que traes es basura contingente.
Nada que sirva a propósito alguno.
Fantasías malenfocadas por privación de sueño
y vida estresada entre miseria y miedo.
Distracciones visuales por exceso de lealtad
a cavernas, a matrices de controles
y dominios aberrantes y falsarios.
Tibetano del gris, mustio de color naranja,
perezoso, lento: medita desde hoy
cómo el modelo de videa se cambia
y se abandona cada estímulo disímil
en cerebro y soluto sobre la faz de la Tierra.
¿Qué se puede hacer con el bardo que transita
hacia la muerte y llega sin imágenes precisas
que magnificar en la fovea,
con sombras de luz y oscuridad
que no pasaron a los núcleos geniculados,
laterales, del tálamo,
que siquiera procesaron presencialidades
de la retina hacia el córtex cerebral
donde el alma de las cosas obtiene
una cariz de ente
y comienza su Informe
de multisensoriales percepciones:
«Tengo imagen y escena.
No soy un fantasma vago.
Digno soy de recibir nuevos códigos
de un reacomodo intelectivo».
3.
Habrá que dar a este zombi del Estado Intermediario
sobre la vida y la muerte, ayuda adicional,
suplementaria, rezos de mantras,
liturgias, nuevas alas a este transeúnte
con karmas de cegato, resurtirlo
con Cesta hermosa sobre la cordillera de Gampo,
con un proceso de percepciones emotivas
y ponerle expresiones en el rostro.
Hay que enseñarlo a oír, enviarle ondas
a la corteza temporal, zona cerebral
de activaciones, la principal y más vital
de de todas. En la zona espiritual
de estímulos acústicos no queremos un tonto.
Que sea enviado a la derecha de una música
de almas, donde se orquestan las variaciones
melódicas de un canto vetromedial,
prefronticio del Hemisferio Derecho
y su corteza, que allí sea su frecuencia
elevada, sanada, y, en el hemisferio lateral
de la izquierda, que perciba el discurso del Oye,
por favor, oye la Dhyana...
4.
Necesito un tibetano con quien pasear
por infinitos paraísos, uno que antes que se vaya
en regreso a mundos de saturnalias terrenales
tenga integrados los sentidos: que vea, oiga,
huela, toque y sabore todo a un tiempo,
pre-atencionalmente apto.
Quiero entera la plasticidad de sus procesos,
aún de sus eventos potenciales
de reacción a los cambios y desafíos
de estímulo, uno maleable, diverso,
con memoria para todo lo que es bueno
en la luz de lo real y la 'liminalidad'del proceso de renacimiento.
Un Sidpa Bardo, bardo reencarnativo
que supere energías alucinatorias
y adopte formas del Buda que lo compadece
y lo traerá de la mano, con mejor recuerdo
de su naturaleza fundamental escondida,
más apto para el amor, la consciencia
y el provisional relevo de estar en el mundo,
e irse de él con su estado intermedio.
02-06-2006 / Del libro YO SOY LA MUERTE
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